Tenemos constancia de ocupación de la zona, al menos, desde la época romana, cuando la Vía Lata se convirtió en la vía de comunicación entre Osca y Caesar Agusta, siendo la zona dedicada al cultivo de cereales. Después fue ocupada por los musulmanes, y retomada por los cristianos en 1118.
Durante la Edad Media, y hasta el siglo XVIII, la localidad, junto con Torralba de Aragón, fue aldea de Almudévar, aunque seguiría siendo un lugar de paso frecuentado por viajeros, dado que en el siglo XV contaba con un hospital (al que pertenecía la capilla de Gracia). También contó con aljama judía, siendo, además, una zona desatacada por su abundancia de pastos y ganado lanar.
Tardienta adquirió su independencia de Almudévar y el título de villa por concesión de Carlos III, en documento firmado en Aranjuez el 17 de junio de 1786, con absoluta jurisdicción civil y criminal.
Su principal impulso vino con la inauguración de la línea de ferrocarril y la estación, convirtiendo a la localidad en un destacado nudo ferroviario, en 1861. El siglo XX comenzaría como una época de prosperidad, con aumento demográfico que daría lugar a la construcción de nuevas viviendas y servicios públicos, como las escuelas o el matadero, durante la época de Primo de Rivera.
Fuertemente castigada durante la guerra civil, y reconstruida parcialmente por Regiones Devastadas, la ansiada finalización de las obras del Canal y del regadío marcarían el final de la centuria, cambiando el paisaje y la vida en Los Monegros para siempre.